Pedro Merino entrando en Meta

El manchego Pedro Merino (Manzanares), del conjunto gallego Super Froiz, ha inscrito esta tarde su nombre en la extensa y prestigiosa lista de vencedores del Trofeo Iberdrola, llevándose la edición número 70. Merino se ha impuesto, llegando desde atrás, al granadino Manuel Sola (Caja Rural-Seguros RGA) en un duelo a dos en las rampas del corto pero empinado repecho del Poblado de Esla-Iberdrola.

La carrera ha tenido dos partes muy bien diferenciadas: una primera mitad más o menos tranquila y controlada –siempre con numerosos intentos de fuga en la cabeza, pero sin que ninguno de ellos llegase a tener distancias muy significativas- y una segunda mucho más tensa y selectiva. Prueba de ello es que tras el primero de los dos pasos por el Alto de Villalcampo apenas quedaron ya 90 de los 174 corredores que habían tomado la salida en el Poblado. Y todo ese corte se montó por una caída apenas unos kilómetros antes, unida al fuerte ritmo que se ha llevado toda la subida.

Tras un nuevo momento de pausa, Caja Rural y Super Froiz han aprovechado para enfilar el pelotón y meter cuneta, lo que ha provocado de nuevo numerosos cortes. De esa manera se entraba en el Alto de Villadepera con tres grupos completamente rotos y casi en fila india. En las primeras rampas del puerto atacaba Manuel Sola, al que se unían Merino, Nicolas Sessler (Lizarte), Miguel Ángel Ballesteros (Polartec), Diego Noriega (Escribano) y Mario García (Pérez Cánovas), que comenzaron a hacer distancia y la llevaron hasta una renta máxima de 1’20” faltando apenas 15 kilómetros para meta. Una fuga hecha por fuerzas y de enorme calidad de la que Ballesteros se acabaría quedando cortado.

Sólo el empuje del Rías Baixas y, en menor medida, el Aluminios Cortizo, hizo que el segundo pelotón llegase con unas mínimas opciones de disputar la carrera a la presa donde da comienzo la subida final al Poblado de Esla. El primero en desatar las hostilidades fue Sessler, pero Sola le echó el guante con solvencia. El granadino siguió con su empuje, mientras Pedro Merino, buen conocedor de la subida, medía las distancias. Finalmente el manchego de Súper Froiz superaba a Sola, con Sessler cerrando el podio y el pelotón viéndolos de cerca pero sin poder darles caza. Aunque se quedaron sin el premio mayor de la victoria, Sola y Sessler se llevaron Montaña y los Sprints intermedios, respectivamente.

En cuanto al resto de clasificaciones secundarias, Alejandro Gomiz ha ganado las Metas Volantes, pasando primero por las dos puntuables. Jorge Bueno ha vuelto a ser, como ayer, el mejor zamorano. Y los madrileños del Escribano Team se quedan con el premio al mejor equipo, tras colocar a Noriega en cuarta posición y Cristian Torres octavo y mejor sub23. Se cierra así esta especial edición del Trofeo Iberdrola, con el que se pone fin a un espectacular fin de semana en las conocidas como Clásicas Zamoranas, donde la nota dominante ha sido el espectáculo y el ciclismo al máximo nivel. 

 

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