Gran fin de semana para el ciclismo cadete en la región el que se vivió en Molinicos (Albacete) con una de sus citas más emblemáticas, donde participaron ochenta ciclistas y más de quince equipos llegados de Madrid, Extremadura, Valencia, Andalucía, Cataluña y la propia Castilla-La Mancha, representada por el valdepeñero Víctor Astasio-Maquivi-PC Box.
La Vuelta a Molinicos llegaba con importantes novedades a su edición número siete, cambiando su contrarreloj inicial por una primera etapa en línea, de 44 kilómetros, con tres duros puertos de montaña, en la que la gran protagonista fue la tormenta que sorprendió al pelotón en el inicio de la carrera. Los cadetes partían a las 17 horas desde Molinicos bajo una lluvia fina que se transformó en una fuerte tormenta en el kilómetro 6, con arrastre de piedras sobre la calzada que fue limpiado por la organización, permitiendo que la competición continuase sin más problema que el manto de agua que hizo aún más épico el trabajo de los corredores. La nota más negativa, sin embargo, fue la caída por un terraplén de un corredor en la bajada del primer puerto, que fue trasladado al hospital por los medios sanitarios, con consecuencias leves pese a lo aparatoso del incidente. Un segundo corredor afectado pudo levantarse y continuar en la prueba.
Precisamente en la subida a este primer puerto, de 2ª categoría, en el Alto de los Toros, va a destacarse José Antonio González (CC Roldán) que se marchará en solitario, manteniendo la ventaja sobre el pelotón durante toda la prueba para llegar a línea de meta de Molinicos con 50 segundos de ventaja sobre sus perseguidores. Por detrás, un trio de ciclistas que no llegará a darle alcance y que se repartirán los dos puestos restantes del podio del día: Luis Cayuela y Salvador Ayala, del Nieto del Lobo, y Jaime Torres, de la UC Fuenlabrada. El pelotón, que se había fragmentado en la subida al primer puesto, llegó muy roto a línea de meta.
González se llevó el premio de Montaña de la etapa tras coronar en solitario los tres puertos, mientras que Luis Cayuela fue el mejor cadete de primer año. El almanseño Daniel Hurtado (Saxun-Extrusax-Primoti) fue el mejor castellanomanchego.
Tras la complicada tarde meteorológica del sábado, el domingo 4 amanecía con sol y un buen tiempo de cara a la segunda y definitiva etapa de la Vuelta. Un recorrido ya tradicional en esta ronda por la Sierra del Segura, con 56 km. y tres duros puertos, la última subida a sólo 4 kilómetros de meta. De nuevo el primer puerto, El Alto de Boche, de 1ª categoría y seis kilómetros, rompería la carrera. Jaime Torres (UC Fuenlabrada) coronará la cima y se marcha en solitario, manteniendo durante el resto de la carrera ventajas de alrededor de un minuto respecto al pelotón, de nuevo fragmentado tras la subida. Por detrás, el líder, José Antonio González, no encontró la colaboración necesaria para defender el maillot amarillo. Torres llegará a meta con un tiempo de 1:29:30 y medio minuto de renta para hacerse con la segunda etapa, el Premio de Montaña y con la general de la Vuelta a Molinicos. Por detrás, un grupo de cuatro perseguidores: a 36 segundos llegaba Luis Cayuela (El Nieto del Lobo) adjudicándose el segundo puesto del cajón y el trofeo al mejor joven, con una ventaja de segundos sobre Rodrigo García (UC Fuenlabrada), tercero, Ferrán Torra (Escola de Ciclisme Isaac Galve) y Daniel Hurtado (Saxum), que volvía a ser el primer castellanomanchego en meta. Adrián Suárez (Indeso Gold Bike Jerez) se llevaba la Meta Volante de la jornada en el Cortijo de la Juliana.
En el balance final, Jaime Torres entraba en el palmarés de la Vuelta a Molinicos como vencedor de su séptima edición, en la que José Antonio González fue segundo y vistió el maillot de la montaña. Luis Cayuela completó el podio de la general, siendo el mejor cadete de primer año y Daniel Hurtado se vistió el maillot de mejor corredor de Castilla-La Mancha. El Nieto del Lobo se coronó como mejor equipo de la Vuelta.
Los organizadores de la prueba, Teresa Moreno y Jorge Lozano, agradecieron de nuevo la participación, subrayando el gran esfuerzo que realizan los equipos para desplazarse hasta Molinicos. Agradecimientos también para la Guardia Civil, “que nos protegió mucho y bien”, sobre todo bajo la tormenta, y para los voluntarios de Protección Civil y de Molinicos.
En la entrega protocolaria de trofeos, junto a Jorge y Teresa, estuvo Lola Serrano, alcaldesa de Molinicos, acompañada por algunos miembros de su corporación y por el representante del patrocinador principal, Bilox. El vencedor de la Vuelta, Jaime Torres, además del trofeo y premio estipulado, recibió como regalo especial un mono de contrarreloj firmado por Héctor Carretero, que quiso sumar su aportación personal a esta cita con el mejor ciclismo cadete.
{gallery}stories/2023/06/molinicos{/gallery}